10 julio 2005

La Legua es piola

Tras varios años en la trinchera del hip hop under, Legua York reivindica sus orígenes. “Lulo”, el líder de la banda, habla de su vida en la población y alega contra “Morandé con compañía”: “Nos regalaron un amplificador y después no funcionó”.

Es un frío y lluvioso día de julio en La Legua y “Lulo”, el líder y alma de Legua York, golpea la puerta de una casa para entrar a sacarse las fotos de rigor. “Es de unos locos angustiados, pero buena onda”, dice antes de saludar a los anfitriones e ingresar al patio.

Luego de varios años en la trinchera más combativa -y desconocida- del hip hop local, su grupo ha logrado cierto impacto. Se presentan todas las semanas y en escenarios que, en ocasiones, no tienen nada que ver con el estilo. “A veces tocamos con grupos punk, góticos o reggae y todo bien. Nos dicen que encuentran bacán nuestra música”, sostiene.

“Lulo” está feliz de vivir en La Legua, un lugar que él llama “un pueblo dentro de una ciudad”. Sabe que la gente mira con cierto desprecio al sector, pero asimismo cuenta que, en el último tiempo, la conflictiva población se ha transformado en un sitio taquillero para la farándula. ¿Dos ejemplos? Hace unas semanas, Pilar Jarpa y un grupo de modelos visitaron sus calles, y Kike Morandé envió un equipo de productores para invitarlos a tocar a su programa.

“Supe que estuvieron aquí esas modelos, pero vinieron terribles de calladas. Si nadie las vio. ¿Que dijeron que acá también había minas ricas? Seguro, hay caleta. Y además de ricas, tienen más cerebro que las cuicas”, responde riendo. El capítulo Morandé, en cambio, lo deja de mal humor. “Lulo” relata que hace cinco meses fueron a buscarlos y tras varias conversaciones aceptaron ir al espacio, por la oferta de un amplificador que seriviría para que los niños de La Legua desarrollen sus habilidades artísticas.

“No queríamos ir al programa porque es entero facho, lavinista y nosotros tenemos un mensaje que se asemeja a Víctor Jara. Pero fuimos porque nos ofrecieron un amplificador. De hecho, nos dieron el regalo envuelto en cámara y cuando lo trajimos a La Legua, no funcionó. Lo llevamos al servicio técnico y nos dijeron que el arreglo salía 50 lucas. Llamamos al programa y nunca nos pescaron”, cuenta con rabia.

-¿Qué haces para vivir?

Hago talleres para los niños de la población, tengo un programa en la radio de acá y también en “La Legua TV”, el canal de aquí. Salimos a hacer notas a las calles, hablamos con la gente. Es entretenido.

-¿Te gusta La Legua?

Es piola. A veces hay problemas, pero hay que convivir no más con eso. Hablan siempre mal de acá, pero todo esto de las drogas es el legado de “Pinocho”. En esos tiempos entraron la droga y los baleos con los “tiras”.

-Grabaste un disco de hip hop con bandas de todo Chile y vas por el segundo álbum. ¿Quieres ser el Manu Chao chileno?


Me gustaría llegar a ser como Manu Chao. Es una persona que ha hecho cosas impresionantes a través de la música. Igual que Fermín Muguruza, que cantaba en Negu Gorriak y que reivindica al pueblo vasco en sus canciones.

Escrito por: Felipe Rodríguez
Fuente: Las Últimas Noticias

1 comentario:

Anónimo dijo...

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